El pasado 9 de enero de 2017 se entregaron en la sede de la Real Academia de Ciencias Veterinarias de España los premios que esta Academia convoca anualmente y uno de ellos, el III Premio Fundación CESFAC, fue concedido a un grupo de investigación del Departamento de Producción Animal de la Universidad de León. Dicho trabajo fue realizado por el reciente doctor por esta universidad Iván Mateos y los miembros del equipo de investigación Cristina Saro, Alexey Díaz, María José Ranilla y María Dolores Carro.
El trabajo premiado, que lleva por título “Investigación en alimentos de rumiantes: pasado y futuro de los sistemas in vitro”, hace una revisión histórica de los trabajos existentes sobre los diferentes sistemas de fermentación ruminal in vitro y además contiene cuatro trabajos experimentales en los que se utilizan dos técnicas de fermentación diferentes llevados a cabo por los autores en el citado departamento de nuestra Universidad.
La fermentación ruminal in vitro permite analizar lo que ocurre en el rumen con un menor uso de animales para su estudio, ya que cada vez existe una mayor conciencia sobre el bienestar animal por parte de la sociedad y por tanto una reglamentación más restrictiva en lo referente a la utilización de animales para experimentación animal.
Las principales conclusiones de este trabajo premiado fueron que los efectos de dos aceites esenciales, utilizados como aditivos, dependieron de la dosis de aditivo y de la dieta incubada. Además, al comparar la fermentación de diversas dietas en el rumen de ovejas y en cultivos no renovados de microorganismos ruminales, en general, las diferencias entre dietas atribuidas al tipo de forraje observadas in vitro fueron similares a las encontradas in vivo. Por otra parte, cuando se compararon tres métodos de procesado del contenido ruminal para la obtención de inóculo para incubaciones in vitro se observaron diferencias significativas en las poblaciones microbianas presentes en dicho inóculo, pero no se observaron diferencias en la fermentación ruminal cuando se utilizó el contenido ruminal procesado como inóculo. Finalmente, en incubaciones realizadas con fermentadores RUSITEC que recibían dos dietas diferentes se observó que las poblaciones de bacterias totales, protozoos, hongos y arqueas metanogénicas presentes en el inóculo se mantuvieron durante 14 días, pero su abundancia disminuyó durante el período de incubación, con la excepción de las bacterias totales que mostraron un aumento. Las poblaciones microbianas de las fases sólida y líquida de los fermentadores fueron diferentes, reflejando la alta compartimentación en el sistema RUSITEC. Los parámetros fermentativos fueron relativamente estables durante el período de muestreo, pero se detectaron cambios en las poblaciones microbianas en este período, lo que demuestra las complejas interacciones que se producen entre los microorganismos ruminales. Los resultados de este trabajo han aumentado nuestro conocimiento de los sistemas in vitro para el estudio de la fermentación ruminal y se están aplicando a las investigaciones de nuestro grupo.
